jueves, 19 de marzo de 2020




                                         LA  LIBERTAD  DEL  CRISTIANO

Se denomina libre al que no es esclavo o no está sometido al dominio de otro sino que es dueño y señor de sí y de sus actos; y en este sentido afirma Aristóteles en su Metafísica que “el hombre libre es causa de sí mismo.
De esta acepción, los términos libre y libertad se han trasladado a significar el modo peculiar de ciertas acciones del hombre…
Así la Libertad, es una propiedad de la voluntad humana, y se apoya en ésta (GER, vol. 14, p. 316)
-          La Libertad como ausencia de coacción. Otro modo: la esclavitud
-          Libertad como dominio de los propios actos.
No libertad religiosa, tampoco Liberalismo, simplemente el buen uso de la libertad recibida
gratuitamente del Creador: un don, un regalo
     Después dijo Dios: Hagamos al hombre a imagen nuestra, según nuestra semejanza (Gen. 26)
“(La libertad de la voluntad) Sin una cierta preponderancia de lo interior sobre lo exterior, preponderancia inexistente en el ser inorgánico, que no cabe hablar de libertad.
Según Kant, la libertad inteligible consiste en que la voluntad es únicamente determinada por la razón pura, con independencia del influjo de las tendencias sensibles” (Walter Brugger)

La vida cristiana, requiere una permanente “Formación”, que le ayude a  conocer lo  que es
Realmente  importante de su vida: el alma, la razón; el intelecto por encima de los sentimientos, también del utilitarismo que tanto se usa hoy. Lo sobrenatural prima sobre lo humano.

La libertad adquiere su auténtico sentido cuando se ejercita en servicio de la verdad que rescata, cuando se gasta en buscar el Amor infinito de Dios, que nos desata de todas las servidumbres.    (Josemaría Escrivá de Balaguer, Amigos de Dios 27)

Una frase conocida y que se emplea con frecuencia: Si permanecéis en mi palabra, seréis en verdad discípulos míos y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres   (San Juan 8,31-32)

Sin duda, la necesidad de las virtudes humanas: La Prudencia, La Fortaleza, La Sinceridad, El Sentido común, junto a la Humildad, que nos lleva a pedir consejo y de conocer y leer y meditar, en un  Manual valioso: el Catecismo; tres referencias al citado:

Dios ha creado al hombre racional confiriéndole la dignidad de una persona dotada de iniciativa y del dominio de sus actos   (CIC, 730)

El hombre: Con su apertura a la verdad y a la belleza, con su sentido del bien moral, con su libertad y la voz de su conciencia, con su aspiración al infinito y a la dicha, el hombre se interroga sobre la existencia de Dios.  (CIC nº 33)

La libertad es el poder radicado en la razón y en la voluntad, de obrar o de no obrar, de hacer esto o aquello, de ejecutar por sí mismo acciones deliberadas. Por el libre arbitrio cada uno disponer de sí mismo. La liberta es en el hombre una fuera de crecimiento y de maduración en verdad y la bondad.  (CIC 731)
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Necesidad de una conciencia bien formada, para acertar en nuestras decisiones y de paso, ayudar a otros muchos. Implica responsabilidad. Hacer rendir, dar cuenta de los talentos recibidos,

Junto al empeño humano, siembre la petición de ayuda a Dios (LA GRACIA), todo es Gracia, lo cita san Pablo, lo repiten, Bernanos, Chesterton, etc.

No me cansaré de repetir, hijos míos, que una de las más evidentes características del espíritu del Opus Dei es su amor a la libertad y a la comprensión  (san Josemaría, carta 1954)

El Prelado del Opus Dei, en su carta de 9.I.2018: La pasión por la libertad  es un signo positivo de nuestro tiempo: significa reconocer son personas;  dueños y responsables de sus propios actos; posibilidad de orientar su propia existencia y si no fuéramos libres no podríamos amar.

Algunos se creen libres cuando caminan al margen de Dios, sin advertir que se quedan existencialmente huérfanos, desamparados, sin un hogar donde retornar siempre. Dejan de ser peregrinos  y se convierten en errantes (Papa Francisco, Evangeli gaudim, 24.11.13)

El Señor, en el Evangelio, de distintas maneras nos enseña o propone la necesidad de rendir,
de  dar cuenta de nuestro paso por la tierra: Parábola de los Talentos, de la Mina de oro, etc.
Se pueden recibir 10, 5, o 2 talentos. No de  enterrar, sino de  rendir.

La vida sobrenatural (gracia santificante) es siempre un don: un don que está llamado a crecer. Pero sólo con la cooperación de la libertad, bajo el impulso de la gracia actual. El cristiano puede impedir su crecimiento, pero no puede alcanzarlo él sólo con sus fuerzas
                                                                               (R.Butkhart-J.López, Vida cotidiana y santidad, vol. II, p. 203)

Que tu vida no sea una vida estéril.    Sé útil. Deja poso. Ilumina, con la luminaria de tu fe y de tu amor.   Borra, con tu vida de apóstol, la señal viscosa y sucia que dejaron los sembradores del odio. Y enciende todos los caminos de la tierra con el fuego de Cristo que llevas en el corazón.   (Josemaría Escrivá, Camino 1)

Festividad de san José, 19 de marzo, 2020



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