NUESTRA VIDA
PRECISA LA ASISTENCIA Y
LA PRESENCIA DEL ESPÍRITU SANTO
Capitulo 2
7, (Catecismo 687-688)) “Creo en el
Espíritu Santo” “Nadie conoce lo íntimo de Dios, sino el Espíritu de Dios”
(1
Corintios 2, 11),
su espíritu que lo revela nos hace conocer a Cristo, su Verbo, su Palabra viva,
pero no se revela a sí mismo. No le conocemos sino en la obra mediante la cual
nos revela al Verbo y nos dispone a recibir al Verbo en la fe.
La Iglesia, comunión viviente en la fe de los apóstoles que ella
transmite, es el lugar de nuestro conocimiento del Espíritu Santo.
8, (Catecismo 690) La misión
conjunta del Hijo y del Espíritu Santo. “Jesús es Cristo, “ungido”, porque el
Espíritu Santo es su Unción y todo lo que sucede a partir de la Encarnación
mana de esta plenitud” (cf
Juan 3, 34)
La noción de la unción sugiere que no hay ninguna distancia entre el
Hijo y el Espíritu Santo… Por eso es por lo que la confesión del Señorío del
Hijo se hace en el Espíritu desde todas partes delante de los que se acercan
por la fe”
(San
Gregorio Niceno, Spit, 3, 1)
9, (Catecismo 691-701) El Nombre, los
Apelativos y los Símbolos del Espíritu Santo.
El nombre propio del Espíritu Santo.
“Espíritu Santo”, tal es el nombre propio de Aquel que adoramos y
glorificamos con el Padre y el Hijo. La Iglesia ha recibido este nombre
del Señor y lo profesa en el bautismo de sus nuevos hijos” (cf Mt 28,29).
El
término “Espíritu” traduce el término hebreo “Ruad”, que significa soplo, aire,
viento…
Los apelativos del Espíritu Santo
“Jesús,
cuando anuncia y promete la Venida del Espíritu Santo, le llama el “Paráclito”
se traduce habitualmente por “Consolador” (cf 1 Juan 2, 1). El mismo Señor
llama al Espíritu Santo “Espíritu de Verdad” (Juan 16,13)
Los
símbolos del Espíritu Santo: El simbolismo del agua,
la acción del Espíritu Santo en el Bautismo. La unción. El
simbolismo de la unción con el óleo es también significativo del Espíritu Santo.
El fuego simboliza la energía transformadora de los actos del
Espíritu Santo. La nube y la luz. Estos dos símbolos son
inseparables en las manifestaciones del Espíritu Santo. Ya en los comienzos,
desde las teofanías del Antiguo Testamento (cf Ex 24, 15-18; Ex 33, 9-10; Ex 40,
36-38). El
sello
es un símbolo cercano al de la unción… “Dios ha marcado con un sello” (Juan 6, 27) y el Padre nos
marca también con él con su sello (2 Corintios 1, 22; Efesios 1, 13; 4, 30). La mano.
“Imponiendo las manos Jesús cura a los enfermos” (cf Marcos 6, 5;
8, 23).
El dedo. “Por
el dedo de Dios expulso yo [Jesús] los demonios” (Lucas 11, 20). Si la Ley de
Dios ha sido escrita en tablas de piedra “por el dedo de Dios” (Éxodo 31, 18). La paloma. “Al final del
diluvio (cuyo simbolismo se refiere al Bautismo), la paloma soltada por Noé
vuelve con una rama tierna de olivo en el pico, signo de que la tierra es
habitable de nuevo”
(cf Génesis8, 8-12)
Nota.
Si se desea obtener mayor conocimiento, se sugiere repasar los números del
Catecismo,
que se reseñan. En este caso, los citados comprenden del (687 al 701)
(Catecismo de la Iglesia Católica, 2ª edición,
capítulo 2, números (687 al 701) del Catecismo)