El Señor siempre cerca de nosotros
“Todas las cosas las tenemos en Cristo (omnia
igitur habemus in Christo). Lléguense a Él las almas cualesquiera que ellas
sean, ora padezcan enfermedad corporal, ora las aflija la ambición mundana, ora
sean imperfectas y deseosas de aprovechar en la meditación, ora perfectas en
virtudes, porque todas están en manos del Señor, y Cristo es para nosotros
todas las cosas (omnia Christus est nobis).
Si deseas curar de tus heridas, Él es el médico. Si te abrasa la fiebre, Él es la fuente. Si te oprime la iniquidad, Él es la justicia. Si necesitas ayuda. Él es la fortaleza. Si temes la muerte, Él es la vida. Si deseas el Cielo, Él es el camino. Si te cercan las tinieblas, Él es la luz. Si buscas alimento, Él es la comida. Gustad, pues, y ved que es suave el Señor: Dichoso el varón que en Él espera. (Salmo 34,8) (San Ambrosio. Libro de la virginidad, 242s)
No hay comentarios:
Publicar un comentario